Madrid, 29 de septiembre de 2021.- La Asociación de Comercializadores Independientes de Energía (ACIE) presentó recientemente su estudio sobre la regulación de la figura del agregador independiente en España elaborado junto a la consultora Frontier Economics. Ante la próxima regulación estatal, en base al marco europeo, este análisis pone de manifiesto la importancia de una correcta regulación que incorpore aspectos importantes como la compensación y corrección entre agregador y comercializador.
Presentado a través de un webinar en el que participaron los principales organismos del sector eléctrico nacional, el estudio analiza el impacto del agregador independiente sobre las comercializadoras para definir los posibles modelos regulatorios ante su inminente llegada al sector energético español.
La agregación de la demanda es una actividad que vienen realizando los comercializadores desde hace tiempo. En este sentido, el estudio incluye las barreras regulatorias con las que se encuentran los comercializadores y con las que también se encontrarán los agregadores independientes.
El agregador de demanda gestionará la demanda de varios consumidores o generadores de electricidad para su venta o compra en los distintos mercados de electricidad. Su implantación favorecerá que el consumidor asuma un papel más activo al modificar su consumo en determinados momentos. Esto le permite asegurar la estabilidad del sistema eléctrico a la vez que obtiene un beneficio económico.
En su análisis Frontier destaca la necesidad de ajustar la regulación española, explicando que el tamaño mínimo de las zonas de regulación es un requisito solo previsto en la normativa española[1] y aboga por acelerar las modificaciones normativas que permitan a la demanda participar en todos los servicios de ajuste y balance como restricciones técnicas, aún limitado a la demanda.
La normativa europea sigue permitiendo a las comercializadoras prestar servicios de agregación de demanda, pero introduce también la figura de agregador independiente de demanda. Como señala ACIE en su estudio, para el correcto funcionamiento de esta nueva figura, es necesario corregir o compensar la activación de la demanda gestionada por los agregadores independientes para no perjudicar a los comercializadores ante riesgos de desvíos o de demanda fuera de su control.
En este sentido, cumpliendo con la Directiva Europea 944/2019, proponen un modelo con corrección y compensación centralizado por el Operador del Sistema que permita acuerdos bilaterales entre comercializadores y agregadores, siempre y cuando estén debidamente comunicados.
Finalmente, ACIE solicita al Ministerio que en el desarrollo reglamentario de esta figura se apliquen los mismos límites regulatorios actualmente existentes para los grupos incumbentes en la actividad de representación, al objeto de evitar un refuerzo competitivo de las empresas dominantes.
[1] Se han analizado los casos de Gran Bretaña, Francia, Italia, Suiza, Bélgica y Finlandia